Les contare como fue mi primera vez, de solo recordarlo me pone muy un poquito hot!jeje
Cuando tenía unos 15 años en casa de mis padres trabajaba un chico que en ese tiempo tendría unos 28 años,
yo era una niñita obvio y como toda niña me acercaba a él y lo abrazaba, el me tomaba de los brazos y me lanzaba al aire.
Pero poco a poco recuerdo cuando mis padres no estaban, salían por negocios, como me abrazaba algo extraño y sentía como rozaba su pene
Por mi cuerpo, luego con más confianza me hacia...
que lo tocara, Dios mío era una cosa enorme jajá, recuerdo que lo agarraba y salía despavorida,
Más adelante el nos enseñaba a mí y a otras amiguitas su miembro nunca habíamos visto otro como para comparar en ese tiempo
Si era diferente a otras, lo cierto es que era enorme y bien gruesa mucho más que mi brazo, luego le escuchaba conversar con mi hermano
Que cuando iba al prostíbulo no lo dejaban entrar porque la tenia grande, ellos pensaban que nosotras no prestábamos atención.
Les cuento esto porque esa idea de su enorme pene quedo bien grabada en mi mente, nunca abuso de mi, y que bueno porque jamás lo hubiera perdonado.
Luego dejo de trabajar en casa y no lo vi por varios años, paso el tiempo y para entonces tenía 17 años, virgen y con unas ganas enormes de satisfacer
a mi cuerpo las noches húmedas que mi edad me proporcionaba, y si cada vez que veía una pija en internet, la que me atraía eran esas enormes y
para que negar siempre lo asociaba con la de Diego, así s llamaba el. cuando un día salía de comprarme una tanguita de una tienda de lencería lo vi,
ahora vendía celulares, me miro y yo no sé que me paso pero mis pies solo caminaron hacia él, me saludo con un beso y gemí, saben me había confundido
con otra chica, no me recordaba, y la verdad paso por mi cabeza miles de cosas pensé que era mejor así, que él no me recordara,
la enorme verga que tenia estaba en ni mente, le pedí su número, dirección, y le dije que iría a verlo.
llego la noche y mis pies temblorosos me acercaron a su puerta, toque, salió y me invito a pasar, conversamos un rato y le dije
si podíamos tomar un vinito y jugar a la botella borracha (un juego de verdad o castigo), el estaba preparado porque vi como 4 botellas
en su mesa, estaba tan alzada que me esforzaba por perder y cuando me decía verdad o castigo elegía castigo, así que como el perdió
primero me dijo castigo, y empezamos poco a poco a pedir desprendernos de la ropa hasta ver su enorme verga, la verdad supero la imagen
que tenia de niña, mi mente y mi concha estaban entonadas así que me olvide del juego y me lancé se la agarre y me la comencé a chupar
el estaba feliz casi no entraba en mi boca, el comenzó a tocar mis senos y luego poco a poco deslizaba su mano y empezó a frotar
mi conchita, hummm... que placer me arrancaba el muy traviezo, de pronto me pare, me dijo que pasa, yo moria por esa verga enorme y queria
ser suya, era mi primera vez y tenia temor.
le comente que era virgen y me dijo que me lo haría muy suavecito, consentí y me llevo a su cama me abrió las piernas, y empezó a frotar
su cabezota en mi vagina, no entraba la mía para variar en pequeña, a pesar de lo lubricada que estaba mi concha, le costaba envestirme,
hasta que en una y sin avisar me la empujo ahhh, me dolió tanto que quise que se saliera pero resistí tanto
había querido esa verga dentro mía que no lo iba a estropear empezó a clavármela y que dolor pero conforme pasaba el tiempo que rico
esa tremenda verga era mía, métemela toda papi, le decía así, así que liiindooo uhmmmmm. hasta que llego dentro, que placer más grande
que sentimos, descansamos un rato y lo hicimos otra vez, juro que yo ya no quería por el dolor del desgarro, pero era tanta mi arrechura
que consentí, el muy desgraciado me hacia todas las poses, mi concha se llenaba con su enorme verga, quería acabar dentro de mi boca
pero no consentí era la primera vez que chupaba una pija y eso era un poco asqueroso para mi, ahora es diferente jaja, cada vez que lo agarro
le suplico que me acabe adentro, deseo sentir sus fluidos corriendo por mi cuerpo....deseo esa leche calentita y (muy rica por cierto)
en mi boca...o directamente por mi garganta...a veces hasta creo que siento verdadero placer cuando se la como...es como si mi vagina estuviera
arriba por unos momentos, para luego bajar y ser penetrada centímetro por centímetro....y quiero aclarar que a veces...el tamaño no es sinónimo
de mucho placer...pero este si es el caso...
Mi fantasía ahora...es estar atada en una cama, con los ojos tapados, y entregarme a sus ganas...a que me haga lo primero que se le venga a la mente
sé que tal vez quiera cojerme por el culo...y para su sorpresa...mi culito está bien preparado...y lo voy a estar esperando para que llene mis nalgas
con ese liquido precioso, que tanto placer me ha dado.
Este es mi primer relato, tengo más, espero que les guste. Mariana
